Durante años los millennials han sido (y seguirán siendo) atacados y criticados por las pasadas generaciones en muchos aspectos de la vida.
Sin embargo, mi generación entiende muchas cosas que otras no tuvieron la delicadeza de entender. Te las menciono…
La universidad no es la única ruta al éxito
Tal vez en el pasado lo fue, pero hoy día un diploma no te asegura una vida llena de éxito.
La economía empeora
El Gobierno sigue quitando beneficios, bajando sueldos, despidiendo empleados y subiendo precios. Sí, estamos en una crisis, pero solo lo sentimos los de la clase media/baja.
Preocupación por el medio ambiente
Mientras que las generaciones pasadas ocasionaron el calentamiento global, y siguen sin importarles… los millennials se preocupan por arreglar lo que ya se ha dañado.
La familia tradicional no es sinónimo de felicidad
Casos de infidelidad, divorcios, violencia doméstica y muchas conflictos más apoyan al ideal que la “familia tradicional” no asegura la felicidad. En cambio los millennials están conscientes que las familias modernas son de todo tipo, género o número de integrantes. Lo que verdaderamente importa es un hogar lleno de amor.
Viajar es más importante que lo material
Esta generación se desvive por las experiencias más que por las cosas materiales. Lo material se deshace, lo vivido jamás.
Trabajar para vivir
No es ideal para nosotros dejar el “pellejo” durante 30 años consecutivos sin ningún tipo de reconocimiento o ascenso. Lo que queremos es trabajar con libertad, sin presión y disfrutarnos lo que hacemos.
Ser saludable es importante
Hay una conciencia mayor en cuanto a los alimentos que consumimos, la actividad física que hacemos y nuestro bienestar.
Las injusticias se protestan
No es ningún “berrinche”, es luchar por los derechos porque alguien lo tiene que hacer.
Ser gay es normal
No es ningún tabú como en años anteriores, ser gay es totalmente aceptado por los millennials y me atrevo a decir que hasta parece ser una moda. (Aunque no debería serlo)