Si hay algo que es super millennial es la obsesión de esta generación por tener un Instagram feed super chulo y “aceptado” por los demás.
No hay nada malo en eso, al contrario tus followers te agradecen el gran gusto y el esmero por cada una de tus fotos.
Tener una apariencia social se ha convertido en parte del diario vivir de todos. Mi intuición me dice que estamos obsesionados, pero ya que lo estamos, perfeccionemos nuestro IG game.
Transmite historias reales
Es Instagram, no una novela. Nada cae mejor en las redes que una persona genuina y transparente. No esfuerces tanto tu imagen, sé tú.
Colabora
Si tu propósito es obtener más followers orgánicamente, relaciónate con personas que compartan tus mismo intereses. Suban imágenes chulas juntos o hagan intercambio de promo.
Mantén una presencia constante
No es que subas cinco fotos en un día (which está cool si lo haces), pero sí es nice que permanezcas en el radar de las redes. No desaparezcas por tantos días sin publicar algo.
Los famosos hashtags
Oh por Dios… En serio, no quiero ofender el estilo de nadie pero, ¿tan necesario es poner 100 hashtags en una foto? Puedes parecer un poco desesperado por los likes. Déjalo fluir y escribe hashtags que vayan con la imagen.
Aesthetic feed
Instagram dejó de ser una plataforma para postear puras selfies hace rato. No confundas aesthetic con el tema (moda, maquillaje, salt life, fitness…) puedes tener el tema que quieras, lo que debes estar muy pendiente es de la belleza y calidad que ofreces en tus imágenes. Decídete por un filtro y sé consistente en la edición de todas las fotos.
No aburras
Sé observador, captura las cosas a tu alrededor, cambia las poses, sube imágenes distintas. No aburras a tus seguidores con lo mismo. Recuerda que tu imagen en las redes es el espejo de tu estilo de vida.
Este post no es para todas las personas… Si es algo de poca importancia para ti, no sigas estos consejos de luz.